viernes, 17 de septiembre de 2010

Hace unos días, en el diario El País, el filósofo Reyes Maté afirmaba que El poder de las ideas poco tiene que ver con la verdad que contengan; su poder depende de quienes las apadrinen. Creo que Sarkozy nos lo acaba de demostrar en la práctica.
De vez en cuando hay que dejar que escapen todos los sueños de nuestra vida.
Ni siquiera la muerte me quiatará lo que he vivido.