Con toda razón, John Le Carré escribió en El sastre de Panamá que Un hombre capaz de decir necedades en tres idiomas distintos es tres veces más necio que un hombre que está limitado a un solo idioma.
Lo importante no es el futuro, sino el presente cuando sueñas con el futuro.
No hay que tener miedo al porvenir; hay que entrar en él, construirlo, controlarlo y disfrutarlo.